8 Temas delicados inesperados y sorprendentes que te harán pensar, “¿En serio?, ¿De verdad eso le hace enfadarse?”

Puede ser difícil para una mujer entender la mente masculina, y existe el peligro de molestar a tu chico con tan solo unas palabras imprudentes. Basándonos en una encuesta a varios hombres, en este artículo te presentamos los 8 temas delicados inesperados y sorprendentes que te harán pensar, “¿En serio?, ¿De verdad eso le hace enfadarse?”

1. Medir su amor preguntándole, “¿Qué es más importante, tu trabajo o yo?”


“Si alguien me hiciera esa pregunta, entonces sin dudarlo ¡elegiría mi trabajo!” Pedir a tu chico que le dé prioridad a lo mucho que te quiere, puede hacer que se sienta obligado. “Olvídate de todo y quiéreme!, es probablemente una manera más adecuada de evitar que tenga que compararte con otras cosas que él valora, como el trabajo o sus amigos.

2. Juzgarle de manera indirecta por malgastar dinero: “Has gastado mucho en eso, ¿verdad?”


“No admito que alguien que se gasta el dinero en sus uñas y en salones de belleza como auto-inversión, me diga en qué me gasto el dinero.” Cualquier hombre se enfadará si le dicen que está “malgastando” el dinero en algo que tal vez sea una de sus cosas favoritas. Intenta adaptar su punto de vista en tu mente – “Si fuera en mi caso, tal vez sería mi dinero para viajar.” – y será más fácil de entender.

3. Quejarte continuamente diciendo cosas negativas sobre tu trabajo, como “No quiero ir a trabajar.”


“Siento como si se creyera que puede dejar el trabajo y casarnos.” Los hombres se molestan a menudo cuando parece que su chica está esperando simplemente a casarse. Si aclaras la verdadera razón por la que no quieres ir a trabajar, como por ejemplo, “No me encuentro bien…”, probablemente se identificará más contigo.

4. Compararle con alguien: “Te pareces a ese famoso, XX..”


A algunos chicos no les gusta en absoluto que se les diga de manera casual “Eres como…” – podrían pensar que te estás riendo de él diciendo que es “¡una versión de mala calidad de XX!” Así que si no estás segura de que no le importará oír algo así, tal vez sea más seguro evitarlo.

5. Hacer comentarios relacionados con la moda como, “Te queda realmente bien el traje.”


“¿Estás diciendo que normalmente tengo un aspecto terrible?” Incluso aunque le estés halagando sobre lo que lleva con toda la buena intención, algunos hombres se lo toman en el mal sentido de la palabra y piensan “Es una indirecta para decirme que no tengo sentido de la moda”. Para evitar tocar temas delicados, intenta decir algo como “Estás diferente a lo habitual – me gusta.”

6. Señalar su dialecto: “¿Qué tipo de acento es ese?”


“¡La gente lleva preguntándome eso desde la Universidad! Algunos chicos podrían ser especialmente sensibles sobre el hecho de no hablar con un acento estándar. Este podría ser un tema delicado para los hombres que hablan con cierto acento. Puedes retroceder diciendo, “Me gusta como suena cuando hablas así” o “Cuéntame más cosas sobre tu lugar de origen.”

7. Hablar de gente rica: “Supuestamente se han comprado el apartamento en efectivo.”


“Dinero, dinero… ¿es qué todo circula en torno al dinero?” Si hablas continuamente sobre gente rica, algunos hombres podrían sentirse criticados subliminalmente por no dar la talla. En cualquier caso, si siempre estás hablando sobre los ingresos de los demás, podrías dar la impresión de ser grosera, así que es mejor evitarlo por completo.

8. Intentar hacerle resumir un tema demasiado largo: “En otras palabras, ¿qué quieres decir?”


Al interrumpir bruscamente a un hombre y pedirle que vaya al grano, es como si le dijeras “Me estás aburriendo.” También podría sentir que le estás dejando claro que tiene una conversación muy pobre. Incluso aunque lo que esté contando sea difícil de seguir, es bueno y parte de la etiqueta conversacional escuchar con paciencia.

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